Enamórate de Torres del Paine: Descubre sus rutas, miradores y más…

Sí, es verdad que Torres del Paine es uno de los destinos favoritos de los amantes de la naturaleza salvaje. También es un imperdible para los fanáticos del trekking con algunos de los circuitos más preciados por aficionados y expertos del mundo entero. Y para muchos fotógrafos es dueño de los paisajes más escénicos del planeta.

¡Visita la patagonia chilena y tú también enamórate de Torres del Paine!

LA EXPERIENCIA

Con una superficie oficial de 227.298 hectáreas, el Parque Nacional Torres del Paine comprende desde la cordillera del Paine y su famoso macizo, que incluye las cumbres Paine Grande y las conocidas torres que le dan su nombre, hasta los “Cuernos” la imagen más icónica de estos gigantes de granito que el mundo entero reconoce y aplaude.

En realidad ¡Torres del Paine es enorme! por lo que puedes comenzar a imaginar todas las posibilidades que ofrece y regala a quienes la visitan.

En el Parque Torres del Paine se encuentran numerosos atractivos naturales, como el río Paine, los lagos Grey, Pehoé, Nordenskjöld y Sarmiento, y los glaciares Grey, Pingo, Tyndall y Geikie, pertenecientes al Campo de Hielo Patagónico Sur, además de numerosos valles que acogen la excepcional flora y fauna patagónica.

Además de peces, reptiles y aves, las Torres del Paine acogen a 25 especies de mamíferos, entre los que, por supuesto, destaca el guanaco y dos tipos de zorro. Desde luego, también el puma es una de las especies presentes, pero no es muy probable que te encuentres con uno de ellos.

En el año 1978, el parque fue declarado reserva de la biosfera por la UNESCO y ha sido por muchos considerado como la octava maravilla natural del planeta. ¡Le sobran méritos!

Para quienes tengan la ocasión y se animen a conocer este impresionante destino en uno de los extremos de nuestro planeta, la experiencia los recompensará con los recuerdos más vívidos del desafío físico logrado y la contemplación de paisajes sin comparación.

Lagos y lagunas, glaciares inmaculados e imponentes, cambios climáticos abruptos que te pueden hacer vivir las cuatro estaciones en un solo día, un viento que inflará no sólo tus ropas, sino tu corazón y tu imaginación para volar por sobre las montañas, los bosques magallánicos y los glaciares, hacen de la visita a las Torres del Paine un imperdible.

Para disfrutarlas en toda su extensión y hacer de ellas un recuerdo inolvidable, es imprescindible tomar algunos recaudos de preparación que no lamentarás.

ACCESO Y ALOJAMIENTO

Lo primero, desde luego, es informarse adecuadamente. El acceso a las Torres del Paine es bastante fácil y expedito, en automóvil propio o alquilado, con alguna de las empresas que organizan tours, o viajando en autobuses que, luego de un recorrido de 100 kilómetros desde Puerto Natales, alcanzan este espectacular Parque Nacional.

Existen distintas alternativas de alojamiento en las Torres del Paine, desde los lujosos hoteles con vistas espectaculares a los sitios de camping (los administrados por la Corporación Nacional Forestal CONAF son gratuitos) y los refugios ubicados en lugares estratégicos a lo largo de los distintos circuitos.

Todos los sitios de camping y refugios operan con reservaciones previas y dada la alta demanda, sobre todo en primavera y verano del hemisferio sur, es obligatorio hacer reserva para visitarlos. Para ello debes visitar el portal www.parquetorresdelpaine.cl donde podrás conocer más del parque y organizar día a día tu visita ¡Es imprescindible tener listo tu itinerario para no perder el cupo en ninguna actividad o atractivo!

LA GRAN “O”

Es el trekking más extremo y desafiante que, con sus más de 100 kilómetros de recorrido, corona la experiencia luego de alrededor de 8 a 9 días de caminata intensa. Es fundamental tener un estado físico acorde con la exigencia, además del equipamiento de montaña necesario para las condiciones extremas. ¡No hay temporada seca en Torres del Paine!

La gran “O” comienza a la entrada del Parque, en Laguna Amarga, comenzando lentamente este primer día de aclimatación, en sentido contrario a las agujas del reloj y contemplando en el camino glaciares y bosques de lengas, coigües y hayas antárticas o “ñirres”.

Los días siguientes serán de esfuerzo creciente, con descansos que te permitan disfrutar de la incomparable vista de los glaciares de Campos de Hielo Sur, hasta llegar a la tan esperada Base de las Torres desde donde apreciar en un día despejado los macizos imponentes que dan su nombre al Parque.

LA FAMOSA “W”

Tomando su nombre de la forma de la ruta que sigue desde el Refugio Grey, la famosa “W” es quizás el circuito más conocido, por ser apto para todos los visitantes con una condición y preparación física normales. Realizar esta aventura con ropa técnica y para todos los climas es de rigor en todos los casos.

Si quieres hacer el circuito completo, prepárate para caminar 8 horas diarias por entre 4 a 6 días, dependiendo de las condiciones climáticas, que siempre pueden sorprendernos.

Nuevamente el premio a este esfuerzo será la vista de las cumbres que dominan el parque. No lo olvidarás, y sabrás que cualquier esfuerzo habrá valido la pena, aunque el cansancio quisiera vencerte a veces.

Recordarás cada instante de la caminata, las noches y los amaneceres silenciosos, la fuerza del viento helando tus mejillas, los colores del atardecer sobre un glaciar.

LAS TORRES DEL PAINE PARA TODOS

Pero es cierto también que no todos pueden o quieren pasar días de caminatas que, aunque recomendables, no son realizables por todos, ya sea por la falta de tiempo disponible para la aventura, por condiciones físicas menos favorables, ¡o simplemente porque no se les antoja!

Torres hay para todos y todas, y si bien la “O” y la “W” son las más renombradas, también hay circuitos que van desde 1 hora de recorrido, así que es también perfectamente posible hacer tours por el día o adecuar tu experiencia al tiempo disponible, sin problemas.

Algunas de estas rutas ni siquiera requieren de entrada oficial al Parque, por lo que no tendrás que pagar necesariamente su costo (alrededor de US$ 50 el voucher por tres días). Lo más recomendable, en este caso, es contar con un automóvil propio o de arriendo, que te dará la libertad de escoger lugares y horarios, a tu ritmo.

MIRADORES

La Laguna Cebolla es uno de esos lugares disponibles sin costo, antes de la entrada al Parque, desde donde realizar una relajada caminata por un terreno plano, que puede durar horas solo contemplando el paisaje, con una espectacular vista de los “Torres” y la observación del paisaje patagónico en todo su esplendor, particularmente la observación de aves en la Laguna.

Llegar a la Base de las Torres es también posible con una aventura de un día. Esta vez, bastante más exigente, con una caminata de 8 horas ida y vuelta desde Laguna Amarga, para llegar a una vista de la clásica postal de las Torres del Paine.

Pero también hay miradores que vale la pena visitar si tu disponibilidad de tiempo es limitada. Los miradores Ferrier, Cóndor y Cuernos te ofrecen vistas espectaculares y son accesibles después de unas pocas horas de caminata, algunos de ellos con relativamente poco esfuerzo.

Las rutas están repletas de atractivos, desde la fauna y flora (es común toparse con grupos de guanacos pastando en los alrededores) hasta los saltos de agua, lagunas y el mágico paisaje de la estepa patagónica, a menudo con el telón de fondo de las Torres y los Cuernos.

Desde rutas amables, fáciles y acogedoras, hasta algunas más desafiantes con subidas pronunciadas, pero de todas maneras posibles para los menos expertos, las alternativas de trekking más cortos y menos demandantes son muchas y al alcance de todos. ¡Enamórate de Torres del Paine!

REALMENTE PARA TODOS

En los últimos tiempos, también el Parque Nacional Torres del Paine, siguiendo la tendencia (y conciencia) mundial de hacer los espacios accesibles para todos, que también ha llegado a Chile, ha implementado experiencias inclusivas que abren la experiencia de este maravilloso Parque a personas con capacidades diferentes.

Es así como, junto a equipos de apoyo, ya son dos los visitantes que han podido llegar a la Base de las Torres … ¡en silla de ruedas! Esto, gracias a la implementación de una silla de ruedas creada para este desafío con una estructura más angosta, de material liviano y ruedas todo terreno, que ya fue donada al parque.

Una meta que desde luego, es aún mayor para las personas con algún tipo de limitación de la movilidad, pero es importante saber que es posible, y que están las condiciones para hacer de esta aventura una realidad.

Lo mismo debe destacarse respecto del primer grupo de personas con limitaciones visuales y auditivas que, acompañadas, fueron capaces de hacer el circuito “O”, el más difícil y desafiante. Felicitaciones y nuestra admiración para todos ellos…

¿Y tú? ¿Qué esperas? No hay excusas para no venir al fin del mundo a vivir la experiencia de tu vida.